JUÁREZ POLÍTICO


Desde el 15 de julio de 1867, Cuando Benito Juárez retorna a la Ciudad de México, y hasta el 18 de julio de 1872, fecha de su muerte, se dio a la tarea de promover cambios e impulsar el desarrollo en diferentes campos; así, en el orden político los objetivos eran llevar a la práctica la Constitución de 1857, sanear y vigorizar la hacienda pública, disminuir el ejército, pacificar al país y consolidar el sistema federal. En la economía intentaron atraer capitales e inversiones extranjeras, impulsar la industria, mejorar la agricultura y establecer un mejor sistema de comunicaciones. En el aspecto social era prioritario poblar al país y promover la inmigración, ya que la población económicamente activa apenas llegaba a los 2 millones de personas. Y en la cultura, terreno en el que probablemente se efectuaron más avances, se defendió la libertad de credos y de prensa, se apoyó la educación gratuita (en 1868 se crea la Escuela Nacional Preparatoria), y se fomentó el nacionalismo en las letras y artes.


Sin embargo, la realización de todas esas tareas se vio frenada por diversas causas, sobre todo por la falta de recursos, la dificultad de enlazar las diversas regiones del país, la dispersión de la población, y la escasa participación ciudadana en las cuestiones políticas. Con todo, debe reconocerse que es en este periodo cuando se asientan las bases de la modernización que posteriormente, durante el porfiriato permitirían el desarrollo de la economía; y es también cuando se consolida el Estado mexicano y el nacionalismo. En ello, el carácter de Juárez, sus principios, sus acciones y su capacidad política fueron fundamentales.